El viernes 16 nos juntamos una buena representación de la comunidad parroquial para un acto bien bonito. Tuvimos, en la Iglesia, la bendición de nuestro Belén. Una celebración que ya habíamos querido inaugurar el curso pasado. Entonces un tal Omicron lo impidió a última hora. Pero este año ya sí que hemos podido. Era la primera vez que hacíamos algo así, y visto el resultado confiamos en que se convierta en una bonita tradición parroquial.
El acto, muy sencillo, contó con representación de mucha gente de la parroquia. Guiado por José Mari R. Olaizola, SJ, contó con gente del grupo de ministros, de familias, de la pastoral de jóvenes, de los scouts… Los coros de jóvenes y de la misa de familias también se sumaron y acompañaron con villancicos. También catequistas, jesuitas de la comunidad y tantas otras personas que celebran y viven la fe en esta comunidad de San Francisco de Borja quisieron hacerse presentes.
El relato del nacimiento, tal y como se cuenta en «Rezandovamos», lo leyó Carlota, que habitualmente canta en el coro de misa de 12,00h. Las palabras del papa Francisco en su carta de hace tres años sobre el Belén fueron hilo conductor para una pequeña reflexión que guiaron Adelaida y Santi, sobre el sentido del Belén. Rezamos juntos con algunos poemas, y luego, tras una introdución leída por Eugenio, coordinador de los ministros de la parroquia, José Mari bendijo el Belén, junto con las imágenes que tantos habíamos traído de nuestras casas. Aunque para la bendición pusimos incluso la figura del niño Jesús, luego se retiró, pues hasta Nochebuena no la pondremos
Niños y mayores disfrutamos el rato. La alegría en rostros lo reflejaba muy bien Terminamos cantando algunos villancicos. Es verdad que aún faltan unos días para Navidad, pero viene muy bien poder irnos preparando un poco por dentro, para la alegría verdadera del Dios-con-nosotros
