Durante este verano vamos a acometer una reforma de la zona penitencial. El objetivo es poder facilitar un espacio de espera y preparación más discreto, silencioso y oracional, una pequeña antesala-capilla a las salas penitenciales que no sea -como ahora- la misma zona de entrada por Maldonado, 3. Creemos que es una mejora muy necesaria y que pueda ayudar a que el sacramento de la reconciliación se pueda vivir con más sosiego y preparar con más silencio.
Para ello, durante los meses de julio y agosto la zona penitencial cambia un poco. A diario se utilizará la sala Laínez (entrando también por Maldonado, 3 pero a la derecha, no a la izquierda). Y los fines de semana se habilitará además la capilla del Santísimo que está en el claustro.
Una reforma así, que supone bastantes cambios, requiere también una inversión necesaria. Y necesitamos la colaboración y ayuda de la parroquia. Por eso os animamos a contribuir a través de alguno de los cauces de donativos que tiene la parroquia (las colectas, bizum, transferencias o ayudas periódicas). Toda la información sobre dichos cauces la tenéis aquí